Santo Domingo. Los disturbios escenificados la mañana de ayer en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) enfrentaron al Gobierno y a la oposición en una lucha de acusaciones sobre quién sería el responsable de los mismos. El primer golpe lo lanzó el ministro de Interior y Policía, José Ramón Fadul (Monchy), cuando acusó al candidato presidencial por el Partido Revolucionario Moderno (PRM), Luis Abinader, de financiar una “concentración” en la UASD que podría atentar contra la integridad física de las personas.
En su ofensiva, también, atribuyó a organizaciones como el Falpo, la cual dijo encabeza el político Fidel Santana, y al Movimiento Rebelde del “patrocinio de los hechos violentos” en la casa de altos estudios. Dijo que el “estado de desesperación” de Abinader no puede fomentar un clima de intranquilidad en el país. Lamentó que a pocos meses de las elecciones ocurran hechos de tal naturaleza.
Mientras por el PRM, la defensa la encabezó el coordinador de Campaña de esa organización, Roberto Fulcar, al acusar al Gobierno de orquestar un plan de cara a las próximas elecciones generales para empañar la imagen de Luis Abinader y sus aliados. Afirmó que los pronunciamientos hechos en rueda de prensa por el ministro de Interior, quien estuvo acompañado por el Jefe de la Policía, Nelson Peguero Paredes, responden a un guión escrito por Joao Santana, asesor de campaña del presidente Danilo Medina, preso en Brasil por hechos de corrupción. Puntualizó que las acusaciones se producen justo en el momento en que el PRM se querellaba en la Fiscalía del Distrito Nacional para que el publicista Joao Santana sea investigado sobre delitos de lavado de activos y soborno en comercio e inversión.
En el contraataque llevado a cabo en el Comando de Campaña del PRM estuvieron presentes Federico -Quique- Antún, presidente del Partido Reformista Social Cristiano; el diputado Juan Hubieres, presidente del Movimiento Rebelde; Fidel Santana, presidente del Frente Amplio; así como Geanilda Vásquez, presidenta en funciones; Sara Solís, presidenta de las mujeres, y Luis Valdez, vicepresidente del PRM.
El primer intento de nocaut se materializó a las 11 de la mañana de ayer en el palacio policial, adonde acudieron el jefe de la institución del orden y el ministro de Interior tras abandonar una misa que apenas empezaba en la Catedral de Santo Domingo por el 80 aniversario de la Policía Nacional.
Mientras, el nuncio apostólico Jude Thaddeus Okolo oficiaba la ceremonia, donde estuvieron efectivos policiales, altos militares, el ministro de Defensa, el Procurador General y el Canciller de la República, entre otros. En la Policía Nacional se desarrolló una rueda de prensa, donde Nelson Peguero garantizaba que la Policía “entera” estaba presta a garantizar el orden público.
En tanto esto ocurría, en la UASD, rodeada de policías, se vivían momentos de tensión.
Disturbios frustran actividades en la UASD
La asamblea que realizaba la Asociación de Empleados Universitarios (Asodemu), con el fin de concentrar a quienes se trasladaron desde el interior del país y explicarle algunos puntos de sus reclamos, entre ellos aumento salarial, se vio interrumpida cuando una persona, a quien nadie pudo identificar, lanzó una bomba lacrimógena en medio del Aula Magna de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), donde estaban concentrados cientos de estudiantes universitarios y varios grupos de estudiantes. También se vio frustrada la marcha-caravana que saldría desde la explanada frontal del Aula Magna hasta el Palacio Nacional.
0 Comentarios